Cinco consejos de limpieza que te harán la vida más fácil
Artículo revisado por el Comité
Además de caros, los productos de limpieza provocan reacciones en nuestra piel y en nuestros ojos. Qué mejor que limpiar nuestra casa empleando productos naturales.
La subida de los precios y la cantidad de tóxicos que desprenden la mayoría de los productos de limpieza que compramos nos obligan a buscar otras alternativas que nos permitan ahorrar y no sean perjudiciales para la salud.
En el mercado existen muchos productos ecológicos que no afectan a nuestras mucosas nasales ni alteran nuestra piel. El problema de ellos es que son excesivamente caros. Comprar productos respetuosos con el medioambiente y que cuiden nuestra salud supone un incremento importante de nuestra cesta de la compra.
Para evitar los riesgos que supone la exposición continuada a los químicos presentes en los productos de limpieza y ahorrar en nuestra cesta de la compra, nada mejor que recurrir a remedios caseros para limpiar nuestro hogar. Te presentamos cinco concejos que facilitará la ardua tarea de mantener limpia tu casa.
Limón para suelos y cocinas limpias
Todo el mundo conoce las propiedades desinfectantes del limón. Pero, además, es un potente quitagrasa. Ello lo convierte en el producto perfecto para limpiar los suelos de nuestra casa y acabar con la grasa presente en nuestra cocina.
Solo necesitaremos dos limones para conseguir que nuestro hogar esté limpio y desinfectado. Y, además, huela bien.
Para elaborar nuestro producto de limpieza exprimiremos los dos limones y pondremos a hervir su jugo. Añadido al cubo de la fregona, podremos emplearlo para fregar nuestros suelos, incluso los de madera. También podemos verterlo en un barreño y limpiar, con una bayeta impregnada en su zumo, los azulejos y electrodomésticos de nuestra cocina.
Vinagre, mejor para el baño
El vinagre tiene también poder quitagrasa, por lo que podemos emplearlo igualmente para limpiar la cocina. En el caso de los baños, su gran poder de limpieza y el brillo que deja lo hacen especialmente indicados para sanear nuestros sanitarios.
Bañera, inodoro, bidé y lavabo. Podemos limpiar todas las superficies de nuestro baño con vinagre. Si queremos reforzar sus propiedades, podemos mezclarlo con limón, o con agua para dejar brillantes los cristales.
Adiós a la cal de los grifos con la harina
No hace falta comprar productos antical para tener unos grifos limpios y sin restos de cal. Con un poco de harina, espolvoreada sobre los grifos, conseguiremos un resultado igual de eficaz, menos contaminante y mucho más económico.
Tapicerías como nueva con lavavajillas líquido
El lavavajillas líquido que empleamos para lavar a mano nuestros platos y vasos es perfecto para dejar como nueva la tapicería de nuestros sofás, sillas, sillones y cortinas.
Mezclado con agua templada, conseguiremos un resultado sorprendente si aplicamos esta mezcla sobre las tapicerías con una esponja.
Agua, leche y vapor para unos azulejos relucientes
Además del vinagre y el limón, si mezclamos agua con leche podremos limpiar los azulejos de la cocina fácilmente. Solo tendremos que emplear vapor de agua para conseguir ablandar los restos de suciedad. ¿Cómo lo conseguimos? Generando vapor con agua hirviendo para que este se adhiera a los azulejos y nos resulte más fácil dejarlos relucientes.
Como vemos, no hace falta dejarse un dineral comprando productos específicos para la limpieza que, además, irritarán nuestras manos y ojos. En casa tenemos todo lo necesario para conseguir una limpieza eficaz por menos precio.