Limpieza ecológica para nuestro hogar
Artículo revisado por el Comité
La mayoría de los productos que empleamos para limpiar nuestro hogar son tóxicos y pueden provocar reacciones alérgicas y problemas respiratorios.
La limpieza de nuestro hogar nos permite disfrutar de un ambiente limpio y agradable, pero ¿es saludable?
Algunos organismos, como la Agencia de Protección Medioambiental de EE.UU. han puesto sobre la mesa la contaminación que existe en nuestros hogares. Limpiar nuestro hogar puede tener consecuencias importantes para nuestra salud, ya que los productos que empleamos habitualmente desprenden sustancias tóxicas que generan distintos problemas de salud, como lagrimeo, dificultad respiratoria, tos, dolores de cabeza, piel, garganta u ojos irritados, alergias…
Los responsables de estos síntomas son los compuestos orgánicos volátiles que liberan los productos que usamos para sanear nuestra vivienda, que además de contribuir al efecto invernadero y ser dañinos para el medioambiente, producen malestar general debido a su toxicidad.
Estos compuestos orgánicos volátiles no solo los encontramos en los limpiadores del hogar; también los barnices y pinturas que cubren nuestros muebles pueden liberar estas sustancias tóxicas. Por ello, es importante que consultemos con los profesionales del servicio doméstico la composición de los productos empleados para el tratamiento de nuestros muebles y que, si podemos, solo compremos muebles fabricados con maderas y demás elementos naturales.
¿Qué hacer para evitar problemas en nuestra salud a la hora de limpiar?
Lo ideal es que empleemos únicamente productos de limpieza biodegradables, ecológicos y naturales, que podemos adquirir en grandes superficies. Pero, qué duda cabe de que, lo más natural es preparar nuestros propios productos de limpieza. De este modo nos aseguramos de que los limpiadores que empleamos son ecológicos y caseros.
¿Qué nos hace falta? Nada que no tengamos normalmente en nuestro hogar. Con vinagre, bicarbonato, agua oxigenada, limón, jabón natural o glicerina, por ejemplo, podemos desinfectar la vivienda sin problemas para nuestra salud. Desde suelos hasta muebles naturales, el agua con vinagre, bicarbonato o limón no deteriora las superficies, ayuda a cuidar nuestra salud y es respetuosa con el medioambiente.
Del mismo modo, es importante que nos acostumbremos a seguir unas rutinas cada vez que limpiemos nuestra vivienda: además de ventilar las habitaciones diariamente, es aconsejable que, mientras limpiemos, las tengamos también abiertas. Igualmente debemos esperar a que se sequen bien los suelos y las demás superficies que hayamos limpiado antes de cerrarlas. El exceso de humedad en las superficies y, por tanto, en el ambiente contribuye a la proliferación de hongos y moho, lo que también puede dañar nuestras vías respiratorias.
Si usamos productos caseros, elaborados por nosotros mismos, y seguimos estos consejos mientras limpiamos podremos disfrutar de nuestro hogar con total seguridad.