¿Qué producto de limpieza emplear en cada superficie?

No todos los productos sirven para lo mismo. No es recomendable, por ejemplo, emplear lejía para limpiar una encimera de mármol o los muebles de madera. Y tampoco sirve de nada usar un limpiador especial para el polvo para sanear los baños.

Precisamente por ello, es recomendable tener varios productos para la limpieza del hogar, cada uno de ellos específico para una superficie, aunque luego hay algunos que sirven para muchas cosas.

Suelos: limpiadores especiales para cada tipo de suelo

Para limpiar los suelos de la vivienda podemos hacer uso de un limpiasuelos, pero hay que prestar atención al tipo de suelo qué es. Los pavimentos de terrazo o de cerámica pueden limpiarse con cualquier limpiador, incluso podemos añadir un poco de lejía si queremos desinfectar la zona. En cambio, si los suelos son de madera o de mármol, por ejemplo, es mejor emplear productos específicos que, además de limpiar, cuiden la superficie y no acaben con el brillo.

Lejías en los baños

En los baños es habitual utilizar limpiadores específicos para esta habitación de la casa. Suelen contener lejía o son desinfectantes. Ello es muy importante por cuanto se trata de espacios que necesitan ser desinfectados de gérmenes. Si no tenemos un limpiador especial para baño, podemos usar lejía disuelta en agua, que limpiará y acabará con los microorganismos.

Los quitagrasas para la cocina

Los quitagrasas son productos imprescindibles para limpiar la cocina. Aunque la limpiemos de manera frecuente, es habitual que la grasa se quede adherida a las puertas de los muebles y a los azulejos. Por eso, para limpiar los muebles, la encimera y los azulejos es necesario contar con un limpiador con efecto desengrasante.

Amoniaco: limpiador ideal para cristales y tapicerías

Los cristales podemos limpiarlos con los típicos limpiadores para cristal. Pero, si no queremos acumular muchos productos en casa, podemos emplear también amoniaco disuelto en agua. Este producto, el amoniaco, es tremendamente eficaz también para limpiar alfombras, colchones, sillas, sillones y sofás. No mancha y acaba con los restos de suciedad presentes en estas superficies.

Pero, además, el amoniaco es un producto quitagrasas por excelencia. Por lo que, si no queremos comprar quitagrasas para limpiar la cocina, podemos hacer uso del amoniaco para acabar con los restos de comida.

Jabón o detergente

Es indispensable para limpiar la ropa, fregar los platos… Por supuesto, no todos valen para todo, es decir, un limpiador para vajillas no podemos emplearlo para hacer la colada, como tampoco podemos utilizar pastillas de detergente para lavadoras en el lavavajillas. Por tanto, cada detergente tiene su función y si contamos con lavavajillas o lavadoras en casa, tendremos que tener varios.

Limpiador jabonoso para la madera

Con este producto podemos limpiar, además de algunos suelos, determinadas superficies, como la de los muebles de madera de casa. También podemos optar por tener un espray especial para muebles, pero el limpiador jabonoso nos servirá para más cosas, ya que con él podremos limpiar, también, las encimeras de mármol de los baños, los rieles de las ventanas, las persianas, los azulejos, etc.