Limpieza de la cocina
Artículo revisado por el Comité
La higiene y la limpieza diaria son de capital importancia para prevenir intoxicaciones alimentarias.
En la cocina se puede acumular bastante suciedad visible e invisible, más difícil de eliminar, debido a la grasa y a la condensación causadas al cocinar.
¿Cómo prevenir la condensación en la cocina?
La condensación puede alcanzar proporciones importantes en la cocina, ya que se forma bastante humedad al cocinar. La ventilación, calefacción y aislamiento son necesarios para combatirla.
- -Asegúrese de que hay buena ventilación: conecte el extractor o abra las ventanas, especialmente si está cocinando.
- -La cocina debe estar a una temperatura adecuada y constante.
- -Aísle las paredes para que no sean una superficie fría que recoja la humedad del ambiente. Por ejemplo, píntelas con pintura al temple en vez de esmalte, o recúbralas con materiales más "calientes": papel grueso, polietileno, corcho, tela de saco o arpillera (excepto detrás de la cocina, ya que podría arder).
- -Tape siempre las cazuelas; si no, habrá un exceso de vapor.
- -No utilice la secadora de ropa si no tiene ventilación exterior.
- -Cocine siempre que sea posible en la olla a presión, y no abra hasta que ésta haya desaparecido.
- -Utilice la olla de cocción lenta.
- -Cocine los guisos y estofados en el horno a baja temperatura.
Zonas "Húmedas"
- -Limpie el fregadero y las zonas de drenaje con un detergente y desinfecte apropiados.
- -Frote los instrumentos de acero inoxidable, de vez en cuando, con un producto químico apropiado si están deslustrados o si tienen manchas. Éstas pueden ser difíciles de quitar con un detergente normal.
Consejo verde. Limpie las manchas con un trapo húmedo empapado en bicarbonato de sodio. Pata limpiar la manchas de ´óxido frótelas con un limón cortado por la mitad. Si no desaparecen pronto, persista en ello; finalmente desaparecerán.
- -No ponga ácidos, como vinagre, aliño para las ensaladas o zumos de frutas, sobre superficies o fregaderos esmaltados ya que podrían dejar marcas visibles.
- -Para blanquear un fregadero de cerámica llénelo con agua caliente y eche un poco de lejía: déjelo a remojo durante una hora, más o menos. La lejía deja las cosas más blancas, pero no necesariamente más limpias. Utilícela sólo si es imprescindible, pues daña las superficies de plástico, y de otros tipos, las tuberías del agua...., además de nuestra piel y ojos.
Tuberías, desagües y rebosaderos
Consejo verde. Eche ocasionalmente in poco de sosa por los desagües, con agua hirviendo; los mantendrá limpios y evitará atascos.
Consejo verde. Un detergente fuerte, pero no caustico, puede hacerse con 255 g de sal, 150 g de bicarbonato de sodio, y 30 g de tártaro. Eche tres o cuatro cucharadas de dicha mezcla por el desagüe, déjelo durante, al menos, unos 20 minutos y, después, eche agua caliente.
- -Limpie los agujeros de los "rebosaderos", y los desagües, con un cepillo de dientes o con uno de limpiar botellas.
Como prevenir los atascos de las tuberías. Ponga una rejilla o un filtro en el agujero del desagüe.
Grifos.
- -Utilice un cepillo para limpiar los grifos y los rincones del fregadero.
- -Limpie los grifos con agua caliente y jabonosa o con un detergente suave.
- -Los residuos de aguas duras pueden limpiarse con un detergente cremoso y un cepillo de dientes viejo.
Consejo verde. Las adherencias de aguas duras desaparecerán con vinagre o con un trozo de limón. Apoye el trozo de limón sobre el grifo y presione al mismo tiempo que lo gira, o empape un trozo de papel de cocina en vinagre y déjelo sobre la mancha durante unos instantes.
Para quitar los residuos de las aguas duras. Para remover los residuos de las aguas duras del interior de un grifo, llene un bolsa de plástico con algún disolvente químico suave y átelo al grifo. Déjelo así durante unas dos horas.