Evita infecciones en tu hogar: sigue las pautas de Guialimpieza
Artículo revisado por el Comité
La higienización y limpieza frecuente de las estancias es sólo una de las sencillas pautas que conviene seguir para evitar infecciones. Por otra parte, hay que prestar especial atención a los productos y utensilios que se emplean en esta tarea o al tratamiento de los alimentos.
Uno de los objetivos que se persiguen cuando se realiza la limpieza de algún espacio es mantenerlo higienizado para evitar infecciones.
Si bien es cierto que hay lugares en los que es fundamental que la higenización sea constante como, por ejemplo, en hospitales o estancias especialmente sensibles –baños, cocinas, etc.-, en términos generales, para prevenir infecciones basta con seguir algunas sencillas pautas que están al alcance de todos:
- Hay que lavarse las manos frecuentemente, tanto si se han ensuciado como si no. Es importante hacerlo, por ejemplo, antes de comer o tocar alimentos, antes de manejar lentes de contacto, antes y después de tener contacto con medicamentos o personas enfermas, si se manipula algún tipo de basura, si se acaricia o se juega con una mascota, etc.
- Las superficies que se tocan a menudo deben limpiarse con productos desinfectantes. Por ejemplo, juguetes, interruptores de luz, mandos a distancia, teclados de ordenador, etc.
- También deben mantenerse especialmente limpios los espacios y utensilios con los se manipulen o vayan a tener contacto los alimentos –encimeras de la cocina, manteles, servilletas de tela, etc.
- Conviene enjuagar todas las frutas y verduras frescas, incluso si éstas no se van a ingerir con cáscara o se van a cocinar. También hay que ser especialmente cuidadoso en la compra y tratamiento de todos los alimentos que se vayan a comer crudos o poco hechos –incluido el pescado y la carne-.
- Se debe prestar especial atención al etiquetado de los productos que se empleen en la limpieza ya que no todos son aptos para según qué elementos. De la misma forma, conviene utilizar paños especiales y diferentes para los diversos tipos de limpieza que se realizan.
- Si se convive con alguna mascota hay que extremar la higienización de las estancias y de los objetos relacionados con ella –areneros, cepillos, comederos, etc.-. Si, además se tienen niños, hay que cuidar que el juego entre ambos sea correcto y que el pequeño no se lleve a la boca juguetes del animal y se lave las manos después de cualquier contacto con él.