Ayuda a domicilio, un servicio de limpieza personalizado
Artículo revisado por el Comité
Este apoyo externo de limpieza puede traducirse en sesiones de plancha o mantenimiento de salones y cocinas, así como derivarse a limpiezas posteriores a la celebración de aniversarios o cenas de gala.
Este apoyo externo de limpieza puede traducirse en sesiones de plancha, puesta en marcha de lavadoras o mantenimiento de salones y cocinas, así como derivarse a limpiezas posteriores a la celebración de aniversarios o cenas de gala.
Basta con dirigirse a empresas especializadas en este tipo de tareas. En función de los intereses del cliente y del tiempo que éste necesite para solventar sus puntuales problemas de higiene la empresa seleccionará entre sus trabajadores a los candidatos más adecuados para el puesto. En muchas ocasiones, por falta de tiempo o por cuestiones laborales, las casas precisan de una persona externa que se encargue diariamente del mantenimiento de la vivienda o inmueble, llevando a cabo acciones tan cotidianas como fregar los platos, aspirar los suelos o limpiar los baños.
En estos casos se ejecuta una contratación de media o larga duración, puesto que la misión fundamental de este tipo de trabajadores suele ser realizar un mantenimiento diario y continuo de la vivienda. No obstante, también pueden producirse contrataciones puntuales, seleccionando este tipo de servicios dos o tres veces a la semana o en momentos en los que el cliente prefiera disponer de esta ayuda antes que ejecutar la limpieza por sí mismo.
Otra de las posibilidades que pueden encontrarse dentro del negocio de la limpieza a domicilio es la ayuda suministrada a personas de la tercera edad, que precisan de un acompañamiento específico en la vivienda para poder seguir ejecutando sus tareas de mantenimiento. La principal característica de estos servicios de atención doméstica es que suelen estar combinados con una atención particular hacia los más mayores, realizando tanto labores de limpieza de la casa como apoyos en la higiene personal, en la movilización o en la toma de medicamentos de estas personas. Se trata, pues, de un soporte muy necesario para aquellas personas que han visto paulatinamente reducidas sus capacidades para mantener la limpieza, cocinar o incluso realizar la compra.